domingo, 29 de noviembre de 2015

Detalles insignificantes

Agradecer, algo tan sencillo como decirles a las personas que nos marcan, que nos cuidan, que nos hacen sonreír que les queremos, que les estamos agradecidos y que son personas extraordinarias. 

Agradecer, tan sencillo y a la vez tan difícil, tan difícil no parecer interesado, cursi, enamorado...


Me encanta agradecer lentamente las sensaciones rápidas que me han dado, me encanta agradecer con gestos y abrazos más que con palabras, me gustan los detalles, me encantan los detalles. 

Me encantan los detalles pequeños que demuestran mucho. Una mirada cómplice, una sonrisa que guarda muchos secretos, un abrazo un poco más largo de lo normal, un "baja que estoy en tu portal", "necesitaba verte", "¿estás mal? ¿dónde estás? no te muevas, voy para allá".

Sí, puede que esté loca, locamente enamorada de los detalles, de las miradas, de las sonrisas...

No, no soy ninguna detallista empedernida, de hecho no soy nada detallista, nunca hago detalles salvo en ocasiones y con personas que los merecen; pero cuando regalo un detalle... se convierte en inolvidable, en una marca difícil de borrar. 
Y todo, porque me encanta agradecerles a las personas a las que quiero que me quieran, que me cuiden, que me marquen.. haciéndoles merecedores de mis detalles.

Así que piensa que si alguna vez te he dedicado una mirada cómplice, una sonrisa con secretos ocultos, un abrazo largo, o un detalle insignificante, es porque me has marcado, me has dejado huella y te estoy tremendamente agradecida.





sábado, 21 de noviembre de 2015

Tú y mis locuras

Que extraña manía de echarte de menos los días de lluvia, que extraña sensación de querer amarte los días de sol.
Que ganas de tumbarme en la playa contigo en las noches de verano, y de meterme en tu cama en las tardes de invierno.

Hablemos del tiempo que hemos compartido mirando las agujas del reloj contando los segundos que faltaban para vernos y de los minutos en los que flota nuestra mente en otra dimensión en la que estamos juntos antes de dormirnos. 
Hablemos del tiempo que queremos pasar juntos mirando las gotas de lluvia en el cristal de tu casa y compararlas luego con las de mi ventana, tumbados mirando al techo y observar los fuegos artificiales que saltan cada vez que te beso, o viendo como se mueven las nubes desde nuestro rincón favorito del mundo.

Hablemos de mí (contigo)
hablemos de ti (conmigo)
hablemos de nosotros
y hablemos de las ganas locas que tengo de salir corriendo y llevarte de la mano al borde de un acantilado para gritarle a los cuatro vientos que te quise desde nuestro primer cruce de miradas.



domingo, 15 de noviembre de 2015

Domingos

Apareciste un domingo normal
un domingo cualquiera, aburrido,
e hiciste que fuera extraordinario,
extraordinariamente atractivo
como lo son tus ojos
como lo son tus labios
como lo soy yo,
cuando estoy contigo.

Llegaste un domingo aburrido
y te quedaste conmigo
inventando nuestro mundo
bajo las sábanas ese domingo de frío
calentando nuestras ideas de niño,
nuestros cuerpos de adulto,
nuestro corazón anciano.

Anciano nuestro corazón
por el daño sufrido
sufrido el daño por algún amor aburrido
que se rompió un domingo de frío.


lunes, 2 de noviembre de 2015

Stand by

Te levantas un día y el único deseo que tienes es desaparecer un tiempo, empezar de cero, irte lejos de tu entorno, tu vida, tu ciudad, tus amigos, tu familia... dejarlo todo en stand by y salir corriendo, conocer un mundo que no conoces y que no te conoce, ser tú mismo, apagar el GPS de tu móvil, que nadie sepa dónde estás, ni siquiera tú, y así puedas encontrarte.

Pero no puedes salir corriendo porque tienes demasiadas normas que cumplir y no sabes dónde ir.

Sólo puedes apagar el móvil, estar sólo, descansar, pensar y desconectar de este mundo que te tiene preso.